
Agradecimiento ministerial a los Colegios Oficiales de Psicología de España
25/05/2020
Los psicólogos piden reforzar la Atención Primaria y los servicios de salud mental para paliar efectos de COVID
03/06/2020Salud mental de los farmacéuticos. Estudio del impacto psicológico del COVID-19

En España ya hay al menos un estudio que pretende analizar el impacto psicológico de la pandemia durante el confinamiento en farmacéuticos y técnicos de Farmacia. Lo están llevando a cabo investigadores de la Universidad de Oviedo, que han conseguido recabar las respuestas a una encuesta on line de 1.227 participantes de 17 comunidades autónomas, de los que el 63% trabaja en una oficina de farmacia.
“Un dato muy llamativo es que más de la mitad de los encuestados presentan estrés psicológico severo. Además, aunque todavía no hemos podido analizar todos los datos, se puede ver que los niveles de ansiedad y depresión en los profesionales son altos”, explica la farmacéutica e investigadora Carmen Baldonedo, que es además miembro de la Sociedad Española de Farmacia Familiar y Comunitaria (Sefac).“El impacto psicológico de la Covid-19 en nuestra profesión es muy elevado. No debemos olvidar que los farmacéuticos estamos en primera línea y, en la mayoría de los ámbitos, muy expuestos a contagiarnos. Hemos podido comprobar que la gran mayoría lo cree así”.
Las cifras de fallecidos, contagiados y los cierres de farmacias revelan el “efecto brutal” de la Covid en las boticas, expone Teodomiro Hidalgo, vocal de Oficina de Farmacia del Consejo General de COF. “Esta nueva normalidad tampoco está siendo fácil. El estrés y la ansiedad son los nuevos compañeros de trabajo”. Indica que la farmacia acusa un doble impacto: “El derivado de su actuación profesional y el de conocer a los pacientes y afectados por el estrecho vínculo entre los farmacéuticos y la sociedad”.
Por otra parte, “nuestro compromiso con la población y la responsabilidad de seguir ofreciendo atención farmacéutica a los usuarios hacen que debamos contener las emociones, y esto podría causar problemas de salud en un futuro”, añade Gema Molinero, del Centro de Información del Medicamento del COF de las Islas Baleares. “Los farmacéuticos debemos sumar la responsabilidad de llevar la gestión del día a día con todos los empleados de la farmacia, la salud del equipo, la división por turnos, las normas de distanciamiento, la desinfección de espacios… No cabe duda de que el estrés es muy elevado”.
Un factor generador de angustia es “la incertidumbre que ha ido reinando durante estas semanas, por los continuos cambios de criterio”, critica Carlos Monfort, profesor de Psicología de la Universidad CEU San Pablo , de Madrid. El experto observa que la profesión acusa el desgaste que provoca la atención al público, el desconocimiento de su labor y la falta de reconocimiento por parte de otros profesionales sanitarios. “Tampoco ayuda el que los farmacéuticos no sean un colectivo especialmente reivindicativo para reclamar medidas y derechos, pero que pese a ello siempre realiza su labor haciendo de filtro al paciente para incidencias administrativas o económicas que se plantean con la Administración”.
Consecuencias
“Puede derivar en un incremento de los niveles de ansiedad, un estado de ánimo disfórico, insomnio, somatizaciones y, en casos más extremos, toda una serie de trastornos de ansiedad, del sueño, del estado de ánimo, adaptativos, estrés postraumático y consumo de sustancias”, advierte Verónica Villanueva, profesora de Psicología de la Universidad Internacional de Valencia. “Es muy probable que entre los farmacéuticos se estén dando cuadros con síntomas como ansiedad, insomnio, dificultades de concentración, irritabilidad, apatía, tristeza y otros de carácter psicosomático, como tensiones musculares, pérdida de apetito, gastralgias o dermatitis”, añade el psicólogo Manuel Salgado, del Centro (Sevilla).
Para hacer frente a estos riesgos, los expertos esbozan una serie de recomendaciones que son también aplicables a la población que se ha mantenido todo este tiempo confinada. “Es fundamental un buen manejo del estrés y del estado emocional, aceptar que es normal tener miedo, expresar cómo se sienten con sus allegados y percibir el apoyo por parte de los demás, así como llevar un estilo de vida saludable y dedicar un tiempo de ocio de calidad que le permita a la persona conectar en otras áreas de su vida que le resulten gratificantes”, resume Villanueva.
Prevenir
Desde el COF de Barcelona resaltan la importancia de aceptar y canalizar adecuadamente las emociones y sensaciones, como culpa, rabia, labilidad emocional, tristeza, frustración y enojo. “Hay que evitar entrar en un diálogo negativo interior, con uno mismo, y exterior, con los otros, que se retroalimenta”.
En el día a día de la farmacia hay que aprender a echar el freno, sobre todo cuando la situación parece insostenible. “Ante la gran carga de trabajo, la alarma y el miedo de los pacientes, las consultas y las llamadas telefónicas que no paran, aunque sea paradójico, cuando se está desbordado hay que parar. ¿Cuánto? Pues como cuando se conduce: cada dos horas es bueno hacer un descanso de 10 minutos”, asegura la farmacéutica del COF balear.
Pero el consejo “más esencial de todos es disponer de habilidades sociales para interactuar con los usuarios, puesto que es muy probable que la mayoría de las tensiones que sufren los farmacéuticos estén relacionadas con ellos”, sostiene Rosario Cáceres, del COF de Sevilla.