Ayer, 19 de octubre, se celebró el Día Mundial contra el Cáncer de Mama, una fecha instaurada por la Organización Mundial de la Salud, con el objetivo de concienciar a toda la sociedad sobre esta grave enfermedad e incrementar las medidas de prevención, la detección precoz, y el acceso a diagnósticos y tratamientos oportunos y efectivos.
De acuerdo con datos de la OMS, el cáncer de mama es el más frecuente en mujeres, estimándose que una de cada 8 tendrá cáncer de mama a lo largo de su vida. En España, las cifras de la Asociación Española contra el Cáncer indican que en 2020 se diagnosticaron más de 34.000 nuevos cánceres de mama.
La Asociación Americana de Psicología (American Psychological Association) recuerda que este diagnóstico supone, con frecuencia, una noticia devastadora cuyo impacto emocional puede afectar a la salud física de las mujeres y a su bienestar psicológico. Si bien sentirse angustiado es una respuesta perfectamente normal frente a un diagnóstico de cáncer de mama, las emociones negativas que perduran y/o se exacerban posteriormente, pueden afectar negativamente el curso de la enfermedad.