“Es posible enseñar y aprender estrategias para hacer frente al discurso de odio y rechazarlo. La educación puede ser un instrumento muy eficaz para abordar el discurso de odio desde su raíz”. Así lo establece el documento publicado por la UNESCO, que lleva por título Afrontar el discurso de odio: respuestas educativas.
El discurso de odio, cuya incidencia se ha visto agravada en los últimos años a nivel mundial, es especialmente agresivo en Internet y tiene consecuencias muy negativas en el comportamiento de la sociedad, acompañándose de un aumento de las agresiones hacia determinados grupos de la población.